Reseña del primer arco de Dragon Ball Super, episodios 1 - 14

Si hace unos días hablábamos de la serie y de si merecía realmente las críticas que estaba cosechando (puedes ver el artículo aquí) ahora es el momento de hacer una breve reseña de lo que ha sido este primer arco, que originalmente iban a ser sólo 12 capítulos (que serán editados en blu-ray) pero que se ha extendido hasta 14 episodios en donde se ha hecho una re-edición de la película La Batalla de los Dioses, eso sí, con algunos cambios que ahora veremos. Sin más, empezamos con esta review.

Para no ser repetitivo con el anterior post sobre la serie y para así ordenar mucho mejor las ideas que me ha transmitido esta primera temporada, voy a organizar esta reseña en dos partes. En la primera parte voy a explicar qué aspectos me han gustado y pondré algunos frames que demuestren mi teoría, en la segunda parte haré todo lo contrario y diré qué no me ha gustado, igualmente también me apoyaré en fotogramas de la serie de así necesitarlo.

Cosas que me han gustado

1- La idea de continuación de la serie que transmite la serie

En este primer punto quizá peque precisamente de reiterar sobre una idea que ya expresé en el anterior post pero me parece importante mencionarlo, ya que creo que esta es la gran baza de la serie. Mientras Dragon Ball GT fue una serie ubicada muchos años después y con un planteamiento que casi era un reboot de la saga original (los personajes se renueba casi del todo, Goku vuelve a ser niños, etc), Dragon Ball Super es prácticamente una secuela inmediata de Dragon Ball Z comenzando la serie poco después de la derrota del monstruo Bú mientras Trunks y Goten aún son niños y Vegeta aún no se ha dejado ese ridículo bigote.

2- La animación y el dibujo

Quizá ahora pongas cara de escéptico debido a las críticas que la serie ha recibido con respecto a la pobre animación de algunas secuencias, especialmente del famoso capítulo 5. No obstante, hay que decir que si vemos con objetividad toda la serie hasta ahora, la animación en general suele ser buena o muy buena. La calidad del dibujo, desde luego, en ocasiones es excepcional y el acabado es totalmente acorde con los tiempos en los que vivimos. No voy a decir que es mejor que la animación de Dragon Ball Z porque hay muchas cosas que tener en cuenta para juzgar eso, pero tampoco se puede decir que Dragon Ball Super tenga una mala animación en base a un pequeño tanto por ciento de planos de dibujo pobre.

Aquí podemos observar la calidad de distintos frames de la serie.

3- La combinación del dibujo tradicional con la imagen generada por computadora

Como decíamos en el punto anterior, el punto extra de la animación de Dragon Ball Super es que combina a la perfección la animación tradicional que se utilizó originalmente para la serie con distintas técnicas de animación por computadora que se utilizan para crear efectos interesantes, especialmente en las escenas de batallas. Tanto en la serie original, como en Z y GT eso era imposible debido al aún primitivo desarrollo digital que ofrecía la época, no obstante, en Super vemos un acabado digital más propio de los animes actuales.

A continuación mostraré algunos de los frames en donde más se nota la composición de personajes dibujados al estilo tradicional sobre ambientes digitales o distintos efectos digitales dados a la serie.

Dos planos distintos en los que podemos ver a Bills 

en un ambiente completamente digital.

Efecto de movimiento en un primer plano de Goku.

Efecto de luz intensa en los rostros de Trunks y Goten.

Aura de fuego totalmente digital de Goku mientras está

transformado en el Super Saiyan Dios.

4- La batalla entre Goku y Bills

Iba a mencionarlo en el apartado de la animación, pero esta batalla que pone punto y final al arco (o a la saga, como se prefiera) es, sin duda alguna, el mejor enfrentamiento protagonizado por Goku desde Freezer y el más intenso si no se tiene en cuenta la pelea contra Vegeta Baby Ozaru de Dragon Ball GT. La pelea ya es toda una genialidad en la película pero la versión de la serie la supera, haciéndola mucho más intensa y provocando que el choque del poder de ambos cause estragos en la Galaxia, al nivel de peligrar la misma estructura de la realidad. Además, en la serie, la pelea es mucho más larga, llevándola desde el despejado cielo a la estratosfera pasando por el fondo del mar.

El combate llega a su cenit cuando ambos contrincantes proyectan

su propia energía en forma de furiosos dragones. 

Esta escena es un homenaje a 'Caballeros del Zodiaco' donde

ocurre algo muy parecido.

5- Se corrigen algunos errores de la película

Quien haya visto Dragon Ball Z: La Batalla de los Dioses y la serie, sabrá que en la adaptación que hace esta, muchos datos de la película están cambiados. La serie cuenta la misma historia, pero lo hace de una forma un tanto diferente, corrigiendo algunas cosas de la película. Voy a explicar qué cosas son estas.

5.1. - Error número 1: El baile de Vegeta

En la película Vegeta, desesperado por entretener a Bills para que éste no destruya la Tierra, hace un ridículo baile que a muchos fans de la serie no les hizo ninguna gracia. El Príncipe de los Saiyans tirando su orgullo por los suelos no es algo que guste a las legiones de fans que tiene, ni tampoco es algo acorde con su personalidad, por muy poderoso que pueda ser Bills. 

En la serie esta escena es sustituía por otra escena en la que Vegeta hace toda una exhibición de sus hasta ahora desconocidas dotes para la cocina. La escena funciona igualmente pero sin hacer trizas la imagen de uno de los personajes más carismáticos de la serie. Por cierto, los más freaks quizá recuerden un anuncio protagonizado por el Saiyan en el que destruía verduras enormes de igual forma que en la serie destruye a un pulpo gigante. Si queréis ver el anuncio, podéis hacer click aquí.

5.2. - Error número 2: Vegeta tiene el aspecto que siempre tuvo en la serie cuando es niño

En la serie, Vegeta siempre tuvo un pequeño flequillo cuando se muestra su infancia en flashbacks. En la película, el Saiyan se representa sin pelo en la frente, con un aspecto muy similar al que tiene de adulto. Esto es así porque el diseño original de Toriyama representaba a Vegeta de niño con el mismo corte de pelo que de adulto, mientras que el diseño de TOEI sobre el Vegeta niño sí que tenía un flequillo que le tapaba levemente la frente. En Dragon Ball Super se optó definitivamente por la versión de TOEI respetando así la continuidad con el anime.

Vegeta siendo niño en el flashback de La Batalla de los Dioses.

La versión de TOEI del mismo flashback, con un pequeño Vegeta que

aún no tiene las entradas que tendrá de adulto.

5.3. - Error número 3: Tarble, el hermano de Vegeta, queda por fin fuera del canon

Mientras que se le nombra en La Batalla de los Dioses cuando necesitan reunir a los Saiyans suficientes para despertar al Saiyan Dios, en Dragon Ball Super se le obvia por completo, quedando así (por el momento) fuera del canon de la serie. Sinceramente, dejar a este personaje fuera del canon me parece lo más apropiado y sensato, teniendo en cuenta que Vegeta lleva muchos años viviendo en la Tierra como para darse cuenta de que tiene un hermano que apenas debe tener un par de años más que su propio hijo Trunks y, sobre todo, porque el Rey Vegeta, su padre, lleva muchos años muerto desde la destrucción del planeta homónimo (casi justo después de nacer Goku) como para tener otro hijo de esa edad.

5.4. Error número 4: Videl ahora se convierte en algo parecido a un Super Saiyan en el ritual

Bueno, esto no es realmente un error porque los Saiyan (o Saiyajin) no existen y, por lo tanto, no sabemos qué efectos reales produciría en Videl su hija aún no nacida al transferir poder a través de ella. No obstante, me quedo con la versión de Dragon Ball Super antes de la de La Batalla de los Dioses ya que tal poder influiría notablemente en el aspecto del anfitrión transformándolo en algo parecido a un Super Saiyan al tener ese poder, literalmente, en su interior a pesar de no serlo.

No se puede decir que su aspecto sea el de una Super Saiyan (el pelo no se ha encrespado aún y sus pupilas aún se conservan, recordad que los SS no tienen pupilas) pero sin duda está cerca de serlo. Por cierto, a ver cuando vemos ya a una mujer Super Saiyan.

Bueno... y hasta aquí.

Ahora, y para concluir, voy a exponer qué cosas no me han gustado de este primer arco, que si bien han sido menos que las que sí me han gustado, también merecen ser relatadas.

Cosas que NO me han gustado

1- Bills es más malvado que en la película, pero también mucho más simplón 

Mientras que en la película Bills era un dios formal y hasta bondadoso que quería retarse con Goku, en la serie es un ser caprichoso y un poco infantil que se comporta como un crío en determinados momentos. En la película Wiss es su acompañante, pero en la serie parece poco menos que su niñera. Su forma de acabar el combate con Goku en el capítulo 14 me parece ridículamente tonta.

2- Poca coherencia en ocasiones con Dragon Ball y Dragon Ball Z

En Dragon Ball Z se nos presenta un mundo con tecnología noventera en la que los personajes ven las noticias en televisiones de tubo, mientras que en Dragon Ball Super Mr. Satán utiliza un teléfono con cámara de fotos y vídeo 3D. ¿Cómo se explica semejante evolución tecnológica si Super comienza cronológicamente muy poco tiempo después de la saga de Bú? Eso sí, el cámara que retransmite todo sigue usando una cámara de hombro de aquella época, es como si cierta tecnología hubiera sido desarrollada y otra no. Raro.

Otra incoherencia de la serie es que Bills menciona que él extinguió a los dinosaurios, cuando durante el Dragon Ball original y al principio de Dragon Ball Z se muestran a muchos tipos de dinosaurios viviendo en lugares inhóspitos y lejos de la civilización.

3- Poca coherencia en su tipo de animación.

Dragon Ball Z era una serie que variaba mucho de un capítulo para otro, pero el caso de Dragon Ball Super es escandaloso. Especial mención al capítulo 4, donde vemos un estilo de trazo gordo que, aunque suele estar presente en casi todos los capítulos, en este en cuestión es predominante.

4- Pilaf y su banda ahora son niños... ¿por qué?

Entiendo que la serie en parte quiere volver a sus raíces y el personaje de Pilaf hace que me ponga ciertamente melancólico, pero no entiendo porque ahora, de repente, es un niño. Pilaf y su banda en Dragon Ball Super ahora son niños, quizá se han transformado a si mismos en niños gracias a las Dragon Balls de forma similar a como Goku lo hace en Dragon Ball GT. Sea como sea, nunca se llega a explicar la razón de esto.

Y hasta aquí mi crítica y análisis de la serie, que como dije es una buena continuación de la saga. Esperemos a ver qué nos depara en el futuro, aunque ya sabemos que pronto un viejo enemigo volverá a la vida.

Un saludo!